Dos grandes aliados: Osteopatía y el método Kusi Wawa
El cólico del lactante se caracteriza por un llanto desconsolado (que no cesa con las habituales estrategias de los padres: después de un baño, de mecerlo, al ponerle el chupete o darle de comer), acompañado de cierta agitación del bebe y flexión de piernas sobre si mismo.
Estos llantos suelen durar más de tres horas al día, al menos tres días a la semana y durante tres semanas. Los cólicos del lactante forman parte el propio proceso madurativo del neonato, por norma general aparecen a partir de la segunda semana de vida, aunque podría ser desde nada mas nacer y en principio pudieran desaparecer como si nada al cumplir los 3 o 4 meses, esto no siempre es así puesto que vemos bebes de 9 y 10 meses con auténticos cólicos del lactante y con los signos de este tipo de disfunción tan dolorosa.
Las normalizaciones con OI no son matemáticas ni podemos crear ningún tipo de protocolo exacto con tiempos y cambios de maniobras para absolutamente todos los cólicos. Es mas, tendremos que ir cambiando de maniobra y modificando en intensidad, ritmo y duración en función de cada caso.
Durante estos últimos meses, he combinado el tratamiento manual con el método kusiwawa. Las expectativas eran grandes, pero los resultados nos han sobrepasado. La respuesta de los bebés al tratamiento manual, seguido en casa con el método kusiwawa ha sido inmediata.
El protocolo era sencillo. Terapia manual con maniobras de osteopatia infantil porque al tratarse de una disfunción mecánica que acompaña al proceso madurativo, el tipo de tratamiento que se realiza con Osteopatia Infantil (OI) Visceral y Craneal, se basa en la normalización del peristaltismo, de la motilidad y tensiones internas que podamos encontrar a nivel del entramado temporo-occipital afectando al nervio neumogástrico y frenillo, así como de las diferentes tensiones encontradas en el espacio abdominal, fruto de los dolores generados por los pinchazos de gases e incapacidad para poder expulsarlos.
Y posteriormente aplicación del wawa wrap y wawa band en casa para tratar los factores físicos del dolor que produce el cólico (calor para conseguir un efectos pedante, activar la circulación y por ello el funcionamiento normal digestivo) y los factores emocionales para simular al máximo la sensación de bienestar en el bebé, haciéndole recordar su paso por el útero materno, según las teorías del Dr. Karp.
Hay una serie de puntos básicos a tener en cuenta para ayudar a no empeorar el cólico y aliviarlo:
- La comodidad del bebé es inversamente proporcional a la nuestra (padres o fisioterapeuta). Cuándo tu bebé esté en plena crisis del cólico o simplemente se muestre nervioso, colócalo boca-abajo en tus brazos. Ponte de pie, mécelo: con una mano sujeta el chupete (para estimularle la succión) y pon la otra encima de su estomago, previamente envuelto en el wawa band, para darle calor y protección.
- Recuérdale su paso en el vientre materno. Les da seguridad. Tu bebé ha pasado nueve meses cómodo y protegido dentro del vientre, hazle creer que está allí de nuevo. ¿Cómo? Envuélvelo en el wawa wrap con flexión de sus piernas y dale calor. También son recomendables los llamados ruidos blancos que podrás descargar en tu dispositivo móvil. Otra opción es poner a funcionar el secador, la secadora o el extractor de la cocina cerca de tu bebé. Todas estas técnicas pueden ayudar a reconfortar a tu bebé, pero presta atención porque a algunos bebés les calma la oscuridad, la quietud y el silencio.
- Identifica tu forma de alimentartepara encontrar la manera de reducir sus gases. Un recién nacido no dispone en su sistema digestivo de las enzimas necesarias para la digestión de determinados alimentos como puede ser la lactosa (leche de vaca, postres lácteos, patatas, embutido…). Al ser ingeridos por la madre, pasa directamente a la leche que el bebé succiona. No te dejes engañar por las leches sin lactosa, les afectan igual. En todo caso, consulta con tu pediatra sobre las leches hidrolizadas. Y observa también su forma de alimentarse. Los bebes pasan por algunas crisis de lactancia en las que de repente demandan mas leche de la que tu cuerpo puede producir y solo hay que darles tiempo.
- Nunca pierdas la calma. Paciencia. Los bebés son esponjas ‘multiconectadas’ a los que cualquier problema emocional les afecta y pueden expresarse en forma de cólicos. No lo pases de brazo en brazo. Evita el famoso: "madre-padre-abuela-madre" ya que sólo conseguirá aumentar la situación de tensión en él.
- Acude al Fisioterapeuta especializado. La Osteopatía Infantil, desde la primera semana de vida del bebé, soluciona el cólico del lactante al activar el peristaltismo lento que padecen la mayoría de estos bebés y al aliviar tensiones y compresiones internas derivadas del proceso madurativo fisiologico. La Osteopatía Infantil es un método seguro, indoloro y sin efectos secundarios, en la que verás resultados desde la primera sesión.
Recordad que vuestro hijo está creciendo y eso también forma parte de vivir
Escrito por
Juan López López
Fisioterapeuta & Osteópata Infantil
https://www.kusiwawa.com/wawa-band
16/05/2017